El Sueño y la Mentira de Pasteur
El Sueño y la Mentira de Pasteur, es un libro de R. B. Pearson publicado en inglés en 1942
Este libro pone al descubierto los fraudes y mentiras que utilizó Pasteur para encumbrarse en la fama y el éxito gracias al apoyo del gobierno de la época.
Mi opinión personal es que Pasteur es el personaje que más ha aportado a la destrucción de la salud de la especie humana. En su lecho de muerte comprendió la verdad y escupió la siguiente frase: “el germen no es nada, el terreno lo es todo”. Pero como es natural, la industria de la enfermedad se preocupó de que dicha frase no tuviera ninguna difusión. A continuación copio unos capítulos del libro traducidos al castellano. Para leer el libro completo traducido hay que pinchar aquí.
Introducción
Atacar la reputación de un hombre famoso, es una cuestión muy seria sobre todo cuando se trata de alguien que ha sido aceptado como uno de los más grandes científicos del mundo. Durante muchos años, Pasteur se ha mostrado como un fundador y líder en serología; pero siempre es pertinente ahondar en los principios de cualquier asunto en el que hay diferencias de opinión, con la esperanza de encontrar la verdad en el tema.
El escritor ha hecho un esfuerzo en sus anteriores libros y folletos para mostrar que la teoría del germen es falsa, y la enfermedad prácticamente siempre es debida a errores de dieta o a la manera de vivir. Los gérmenes están solamente presentes como recicladores de los tejidos muertos y desechados, y no como la causa de la enfermedad.
Sin embargo, la creencia errónea de que los gérmenes causan la enfermedad y deben controlarse o eliminarse para que pueda curarse está tan extendida como cerradas las mentes de muchas personas a cualquier otra idea en este asunto.
Por esta razón parece que una investigación completa de este tema, el fundamento en que se basa, e incluso la buena fe de aquellos que lo empezaron a su manera, es necesario antes que cualquier idea sensata acerca del tratamiento apropiado de la enfermedad puede promulgarse ampliamente.
¿Cuándo la Srta. Ethel Douglas Hume escribió “Bechamp o Pasteur” ? En 1923. Parecía ser justamente la cosa que llenaría esta brecha y acabaría para siempre el uso de los sueros y de los otros productos biológicos. Pero han pasado 19 años desde que apareció ese libro que debería haber marcado una época en las artes curativas y no recibió la atención que merecía en los círculos médicos y, aunque está ahora en su segunda edición, la profesión médica está usando los biológicos más que nunca.
Es necesario revisar el asunto para mostrar la verdad con respecto a la falsedad de las ideas de Pasteur y su exigencia de fama, y la base fraudulenta en la que descansa su teoría de germen, como bien lo mostró la Srta. Hume en “Bechamp o Pasteur”, y para agregar otros hechos y estadísticas que apoyan la idea de que la teoría del germen es falsa, con la esperanza que puedan recibir mayor atención, y posiblemente permitan una completa revisión del tema del tratamiento de enfermedad, sobre todo con respecto a la serología.
¿Las traducciones del francés, y otro material en los capítulos 2, 3, 4 y 5 no acreditados por otra parte, son de “Beauchamp o Pasteur” por Ethel Douglas Hume
Para cerrar, deseo reconocer mi deuda al Reverendo y la señora Wilber Atchison de Chicago por sus muchas sugerencias y su valiosa ayuda en la preparación del manuscrito. A la señorita L. Loat, secretaria de la Liga de la Anti-vacunación Nacional de Londres, quien también ha sido muy gentil respondiendo a cada demanda de información con todo el esfuerzo necesario, algunos de los temas que se compilan han implicado un trabajo considerable.
R. B. Pearson el 15 de enero de 1942
LA HISTORIA ANTERIOR DE LA TEORÍA DEL GERMEN
Si usted se remontara en la historia de la profesión médica y de las varias ideas con respecto a la causa de enfermedad que sostuvieron varios médicos antes de que Pasteur promulgara su «teoría del germen» encontraría evidencia convincente de que Pasteur no descubrió nada, y que deliberadamente, se apropió, falsificó y pervirtió el trabajo de otro hombre.
La llamada teoría del germen, era muy anterior a Pasteur tanto que él pudo presentarlo como nuevo; ¡y se salió con la suya! F. Harrison, Profesor Principal de Bacteriología en la Universidad de Macdonald (la Facultad de Agricultura, Universidad de McGill), Quebec, Canadá, escribió una Revisión Histórica de Microbiología, publicada en “Microbiología”, un libro del texto en que él dice en parte,:
«Geronimo Fracastorio (poeta italiano y médico, 1483 – 1553) de Verona, publicó un trabajo (“Del et de Contagionibus Contagiosis Morbis, eorum et Curatione”) en Venecia en 1546 qué contenía la primera declaración de la verdadera naturaleza del contagio, la infección, u organismos de la enfermedad, y de los modos de transmisión de enfermedad infecciosa. Él dividió las enfermedades en aquéllas que infectan por contacto inmediato, a través de agentes intermediarios y a distancia a través del aire. Organismos que causan la enfermedad, llamados seminaria contagionum que él supuso eran similares a materia viscosa o glutinosa, o a los estados coloidales de substancias descritos por los químicos modernos. Estas partículas, demasiado pequeñas ser vistas, eran capaces de reproducirse en los medios apropiados, y se volvieron patógenos a través de la acción de calor animal. Así Fracastorio, en el siglo dieciseis, nos dio un perfil de los procesos mórbidos en lo que se refiere a la microbiología».
Un libro publicado más de trescientos años ante de Pasteur parece ser una anticipación más asombrosa a las ideas de Pasteur, sólo que – no teniendo un microscopio – Fracastorio no comprendió al parecer que estas substancias podrían ser organismos vivos individuales
Según Harrison, H. Jansen fabricó el primer microscopio en 1590 en Holanda, pero no fue hasta 1683 que se construyó algo de suficiente poder para mostrar las bacterias. Él continúa:
«En el año 1683, Antonius Leenwenhoek, un naturalista holandés y fabricante de lentes, comunicó a la Sociedad real inglesa los resultados de las observaciones que él había hecho con un microscopio simple de su propia construcción, magnificando de 100 a 150 veces. Él encontró en la saliva, el sarro dental, etc., lo que denominaba animaculos. Describió lo que vio, y en sus dibujos mostró formas de bastón y de espiral que tenían motilidad. Con toda la probabilidad, las dos especies que vio eran los que ahora son reconocidos como bacilus maximus buccalis y el spirillum sputigenum.”
Las observaciones de Leenwenhoek eran completamente objetivas y en contraste con las visiones especulativas de M. A. Plenciz, un médico vienés que en 1762 publicó una teoría del germen de las enfermedades infecciosas.
¡Plenciz sostuvo que había un organismo especial para cada enfermedad infecciosa, que los micro-organismos eran capaces de reproducirse fuera del cuerpo, y que ellos podrían trasladarse por el aire. Aquí el gran pensamiento de Pasteur está completo – e impresa un siglo antes de que este último pensara en él (?). Note cuan concisamente se anticipa a todas las ideas de Pasteur en los gérmenes. Aunque allí parece no parece haber ninguna prueba de que Plenciz tenía un microscopio, o conociera el animaculo de Leenwenhoek, los dos son posibles, y probables, ya que él era bastante prominente; y debería tener el crédito de semejante descubrimiento – en lugar de Pasteur, si la teoría del germen tiene algún valor. Esta idea que al menos a las personas de su tiempo, deben haber considerado completamente extrañas como el contagio, la infección y las epidemias y quizás se discutieron ampliamente en los círculos médicos de ese tiempo, y en la literatura disponible a Pasteur.
Esto era conocido extensamente. La enfermera inglesa conocida mundialmente, Florencia Nightingale, publicó una critica a esa idea en 1860, 17 años antes de que Pasteur la adoptara y la proclamara como suya propia.
Ella dijo de la infección:
”Las enfermedades no son individuos organizados en clases, como los gatos y perros, sino estados que crecen unos de otros. No estamos viviendo en un continuo error al considerar las enfermedades como hacemos ahora, como entidades separadas que deben existir como los gatos y perros, en lugar de verlas como condiciones, como una condición sucia y una limpia, y siempre bajo nuestro control, o más bien como reacciones de naturaleza suave, contra las qué nos hemos puesto nosotros? Yo me planteé que la viruela, por ejemplo, era una cosa que tuvo un primer espécimen y una vez en el mundo siguió propagándose en una continua cadena, así como hubo un primer perro, (o un primer par de perros) y esa viruela no empezaría, como tampoco un nuevo perro lo haría sin haber tenido un padre.”
“Desde entonces he visto con mis propios ojos y olido con mi propia nariz la viruela que crece de los primeros especimenes, o en los cuartos cerrados o en espacios apiñados dónde por alguna posibilidad no pudo haber sido ‘cogida’, pero debe de haber empezado. He visto empezar las enfermedades, crecer, y pasar. Ahora, los perros no terminan en gatos.”
“He visto, por ejemplo, crecer la fiebre un poco sobrecargada; y luego devenir en tifoidea; y luego en tifo, y todas en el mismo ámbito.”
“No sería mucho mejor, más real , y más práctico, si consideráramos la enfermedad bajo esta luz (la experiencia muestra que los adjetivos son para las enfermedades, no los nombres ni los-sustantivos): – la verdadera enfermería ignora la infección, excepto para prevenirla. La limpieza y el aire fresco de las ventanas abiertas, con la atención continua en el paciente, son la única defensa que una verdadera enfermera pide o necesita.” El manejo sabio y humano del paciente es el mejor resguardo contra la infección. La parte mayor de cuidar consiste en conservar la limpieza.
La doctrina de la enfermedad específica es el gran refugio de las mentes débiles, incultas, e inestables, como ahora es regla en la profesión médica. No hay ninguna enfermedad específica; ¡hay condiciones de enfermedad específicas». Aquí tienen a Florencia Nightingale, una de las más famosas enfermeras de la historia, después de una larga experiencia con la infección, el contagio y las epidemias, desafiando la teoría del germen 17 años antes de que Pasteur la proclamara como su propio descubrimiento! (Vea Capitulo.8)
¡Ella entendió claramente la absoluta falacia antes de 1860, lo que Pasteur solo en pudo atisbar en 1878 o después! Y para ver que parásito era Pasteur de los hombres que hicieron cosas, permítanos remontarnos unos años, al tiempo en que el estudio de los gérmenes era un resultado del estudio de fermentación.
LA INMUNIDAD REAL
Hace muchos años el famoso médico inglés Alejandro Haig demostró en «El ácido Úrico en la Causalidad de Enfermedad» que el deterioro de tejidos de celulares era principalmente debido al ácido úrico formado por la destrucción de las proteínas, y que todas las carnes animales contenían algún ácido úrico, por esto era mucho más potente activando este deterioro que las plantas frescas que están libres de ácido úrico.
Sostenía que los gérmenes eran de importancia secundaria, y nunca la causa de las enfermedades que frecuentemente encontraban.
Una sorprendente confirmación de sus ideas parece venir de algunos experimentos dirigido por F. Pottenger, M.D., y D. G. Simonsen en gatos.
Ellos tomaron dos grupos de gatos y los sometieron a dietas de carne y verduras idénticas, sólo que en un grupo la carne se les dio cruda, y este grupo mantuvo la buena salud a lo largo de los experimentos. En el otro grupo la carne era cocinada, y este mostró un deterioro asombroso de la salud de todos los animales.
Encontraron todos los signos de falta de minerales, como el desarrollo incompleto del cráneo u otros huesos, piernas arqueadas, raquitismo, curvatura de la espina, parálisis de las piernas, convulsiones, abscesos tiroideos, y degeneración de las células del ganglio del nervio de motor a lo largo del tallo cerebral y del cordón espinal, con algunas células afectadas en el cerebelo y la corteza cerebral.
Por extraño que parezca ninguno de los gatos sometidos a carne cruda tenía estos problemas en absoluto, aun hay millones de seres humanos con estos trastornos sin que se tenga una concepción clara de su causa.
Ellos agregan, de estos gatos:
«¿La deficiencia en los animales experimentales de estos nutrientes tan importantes hace que la tercera generación sea incapaz vivir más allá del periodo que corresponde a la niñez en el ser humano».
Por qué sólo los gatos alimentados con carne cocida tuvieron estos problemas? Debemos recordar que toda proteína contiene nitrógeno y azufre que cuando son liberados en el cuerpo se mezclan con agua y otras materias para formar los nocivos ácidos úrico y sulfúrico los cuales deben neutralizarse inmediatamente con minerales alcalinos para prevenir la destrucción celular. Si ningún mineral está inmediatamente disponible, ellos destruirán el tejido viviente para conseguirlos. Esto liberará más nitrógeno y azufre a su vez para continuar hasta el infinito el proceso.
Además, todas las formas de carne animal contienen proteínas y ácidos que son digeridos durante el proceso de la digestión, y estos experimentos demuestran concluyentemente que al cocinar la carne destruyen una gran cantidad proteína, causando mayor formación de estos ácidos que fue claramente lo que arruinó las vidas de esos gatos. Si los humanos quieren evitar estos resultados, deben evitar la carne cocinada y dejar toda carne, por el resto de sus vidas.
Estos ácidos estropean los tejidos del cuerpo, y los gérmenes aparecen solo como los recicladores; si podemos detener el deterioro del tejido a través de una dieta libre de estos ácidos, también podemos acabar el peligro de los gérmenes, así como los problemas de la descalcificación eliminando la carne. Reduciendo la proteína ingerida se lograría esto en gran medida.
El doctor M. Hindbede, un famoso nutricionista danés, dice que un el hombre de 150 libras puede mantenerse en media onza de proteína al día, (15 gramos), y es más saludable que una persona que come una mayor cantidad ; y agrega que debe ser proteína vegetal.
En los tiempos bíblicos, las personas comían frutas y nueces y tenían buena salud en edades avanzadas, pero en el diluvio de Noe, disminuyeron tanto las frutas y nueces que el hombre desde entonces comió carne cruda y cocida y sufrió y murió como estos gatos.
El doctor r J. Bitner, de Yakama, Washington, ha curado infecciones intestinales en niños pequeños quitando la leche y las proteínas de la dieta durante dos días, y dando una cantidad de pulpa de manzana que tiene un considerable efecto antiséptico . Él curó aproximadamente el 90% de sus casos con este tratamiento de dos días, aunque tuvo muchas recaídas entre los 10% restantes cuando les permitieron la leche y proteínas.
Esto creo, fue debido al corto tratamiento que no elimina completamente todos los desechos de proteína del sistema. Periodos de 4, 6 u 8 días o aún más largos sin leche ni proteína en los casos más severos tienen buenos resultados.
Sin embargo, él sólo tuvo una muerte en 946 casos, un registro mucho mejor que el que el médico promedio normalmente tiene en estos casos.
Muchas autores sostienen que un sistema bien mineralizado como el de un vegetariano, nos haría completamente inmunes a la acción de los gérmenes de todo tipo. El doctor J. Greer dice en «El Médico en la Casa» y también en «El Camino sin Drogas para la Salud Perfecta» que en los casos de difteria, si el paciente hace gargarismos con jugo del limón cada hora, limpiará la membrana falsa en poco tiempo. Posiblemente sería mejor hacer gárgaras más frecuentes y una dieta exclusiva de jugo de frutas durante unos días restauraría la salud rápidamente.
En un artículo titulado «Aplastando limones» del 24 de julio de 1926, (p.68), Samuel Blythe aconseja a todos los visitantes no aclimatados a los países tropicales evitar completamente la carne y el licor y reducir a un mínimo la cantidad de proteínas y almidones, y subsistir principalmente de frutas y verduras. Él agrega:
«El zumo del limón es la panacea para los pies sensibles en los trópicos. Es el regulador, el revitalizador, el protector contra la fiebre, el enemigo de acidez tropical, el enemigo de los estados reumáticas y el calmante de la sed. No hay ninguna duda que las dos frutas más beneficiosas son la naranja y el limón, y es en los trópicos que el limón brilla con la mayor efulgencia. Es un policía que vigila el cuerpo, prestando estricta atención al hígado, proporcionando sales minerales, y el proceso de la digestión libera sus cenizas alcalinas que neutralizan los copiosos ácidos resultado de las condiciones de vida tropicales. El squash de limón es una limonada como nosotros la conocemos, hecha de limones frescos, mientras que la limonada embotellada en los trópicos es una preparación artificial de ácido cítrico y debe evitarse. El resultado fue maravilloso. El zumo de limón mejoró todas mis funciones corporales, me conservó la salud perfecta, y hace tiempo que he pasado mis 50 años. No tenía un dolor, ni una perturbación digestiva, ni náusea de ninguna clase… y estaba absolutamente bien en todo sentido. Simplemente un poco el cuidado en la comida y el consumo asiduo de zumo de limón lo hizo. La misma bebida – la limonada – así como otros, como el jugo de la piña, la toronja, las naranjas, y los extractos de verduras, remolachas, zanahorias, tomates, etc., son todo ricos en los minerales necesarios para controlar la acidez.”
Y podemos usar menores cantidades si evitamos carnes y licores y limitamos la cantidad de proteínas y almidones acidificantes a las necesidades mínimas del cuerpo.
Una dieta correcta controlará cualquier infección así como la mayoría de las otras formas enfermedad.
Pues, desde el 1942 para acá ha llovido mucho y todo indica que R. B. Pearson estaba equivocado.
Hola Fco,
Estoy releyendo el «Manual del…» y me surge alguna duda. Lo primero he de decir gracias por la receta de pan Integral…Maravilloso!!totalmente cierto, a partir de ahora el chiqle que venden en las «panaderías» pasó a mejor vida. Leyendo sobre los sistemas de aviso que nuestro cuerpo tien, pensé una cosa. Teoricamente, el dolor es una manifestación de que algo no funciona, así como los síntomas de una emfermedad. Pero y que se podría decir de la insuficiencia renal? no tiene síntomas y realmente apenas se manifiesta, es decir, notar no se nota nada.¿hay alguna respuesta?.
Un saludo y gracias por los comentarios
Plinio, el que tu trabajes para la industria de la enfermedad no te da derecho a afirmar que este señor estaba equivocado sin demostrarlo con argumentos. O es que para eso abdicas de la ciencia?
Tatu, no creo que sea posible que alguien estropee sus riñones sin notar ninguna molestia por el camino. Hay que ser muy persistente para conseguir semejante proeza, a no ser que los haya destrozado un medicamento, en ese caso resulta más fácil.
Buenisimo aporte!,Escuela de la salud. Como decia Hipocrates: » Deja que el alimento sea tu medicina y deja que la medicina sea tu alimento.» 🙂
Excelentes aportaciones. Ya sé que es antiguo, pero ¿se puede restaurar el enlace del principio para la descarga?
Muchas gracias por toda la valiosa información
Este tema es verdaderamente interesante. estoy convencido que Paster sus teorias
fueron erróneas y sobre todo que no se merecia su Premio Novel. Estudiemos a Becham que dijo «El microbio es nada el terreno es todo»
Tambien hay que tener en cuenta las investiagaciones del Premio Nobel de Medicina
del año 1931.trata de la alcalinidad y acidez.
Otro tema super intersante es la investigación de Alexis Carrel. Quien estudio el líquido intersticial, que buscaba la vida eterna.
Hola
El enlace del artículo al libro de R. B. Pearson, «El Sueño y la Mentira de Pasteur», ya no funciona. Dejo enlace donde sí se puede encontrar por si Francisco quiere actualizarlo o cualquiera que llegue a esta entrada desea leerlo.
https://nostromoatierra.files.wordpress.com/2013/10/el-suec3b1o-y-la-mentira-de-pasteur.pdf
Además complemento el artículo de Francisco con esta entrevista a Máximo Sandín: «Cuestionando los pilares de la biología. Entrevista con Máximo Sandín».
https://www.youtube.com/watch?v=iQJlQ_cmJ7Q
Un saludo